Cuando las Fuerzas Armadas eran columna vertebral, no pegatinas en un desfile
Hoy el Ejército es una institución olvidada, decorativa, a la que solo se recurre para poner sacos en una riada o cargar bolsas en una pandemia, mientras se le ningunea desde los despachos y se le insulta desde las tribunas. Pero hubo un tiempo, y no tan lejano, en que las Fuerzas Armadas eran la columna vertebral del Estado, la reserva moral de la patria, el escudo de la unidad nacional. Ese tiempo fue el del franquismo. Y ahí, como en tantas otras cosas, Franco no se andaba con tonterías.