Franco, sí, representó y representa el heroísmo, la grandeza y la gloria de España. Como soldado, como estadista, como cristiano. Lo siento por ti, erudito sin abuela: el miércoles en el Instituto Cervantes sí que hubo algún enano por ahí; un enano no necesariamente de estatura. Y ese enano no era Francisco Franco.

Hay artículos que informan, artículos que opinan y luego están esos que parecen escritos después de una tarde intensa en X (antes Twitter) y dos cafés de más. El último ejemplo lo tenemos en Público, donde alguien ha decidido que la mejor forma de hacer periodismo es soltar insultos a diestro y siniestro y montar una película en la que los malos son siempre los mismos y los buenos llevan su misma camiseta.

Me entero leyendo la prensa no adicta al nuevo régimen que el diputado Santiago –de santo nada, que conste- ha impulsado una moción parlamentaria para que sean condenados o fuertemente sancionados los organizadores y firmantes de la Plataforma 2025; precisamente, un colectivo que pretende difundir la Historia amordazada del régimen de Franco.

Las discotecas son espacios de ocio donde la música es el eje central. Desde reguetón hasta rock, pasando por himnos festivos y canciones populares, la variedad de estilos es inmensa. Sin embargo, cuando se plantea la posibilidad de poner el Cara al Sol, la polémica está servida.

La Plataforma 2025 ha emitido un comunicado en respuesta a la reciente solicitud de Enrique Santiago, diputado de Izquierda Unida, quien ha propuesto la imposición de sanciones penales o administrativas contra los firmantes de un manifiesto en defensa de Franco promovido por dicha organización.