El público se rebela contra 50 años de mentiras
Mayo nos ha dejado una sorpresa editorial que, para algunos, es un escándalo, y para otros, entre los que nos incluimos, una magnífica noticia: el libro 50 años de mentiras sobre Francisco Franco, publicado por SND Editores, se ha colocado entre los más vendidos del mes. Ahí lo tenéis, con la frente bien alta junto a otros títulos que hablan de Rusia, la Cruzada de 1936 o la figura de Jesús de Nazaret. Un fenómeno que no se explica solo por la nostalgia, sino por algo mucho más profundo: las ganas de saber, de desmontar los mitos y de rescatar la verdad de entre los escombros de medio siglo de propaganda.
En la Plataforma 2025 llevamos tiempo denunciando cómo se ha tergiversado la historia reciente de España. El franquismo ha sido caricaturizado, demonizado, y utilizado como arma política para justificar el desguace nacional que sufrimos hoy. Se ha perseguido la memoria de Franco con leyes, censura cultural y un revisionismo enfermizo que quiere borrar su huella en la historia. Pero hay algo que ni la propaganda ni los decretos pueden hacer desaparecer: los hechos. Y los hechos, por mucho que duelan a algunos, empiezan a abrirse paso.
El éxito de este libro no es casualidad. Es un grito. Un «¡basta ya!» de miles de lectores hartos de que se les tome por idiotas. Hartos de que se les diga qué pensar y cómo recordar. Porque Franco no fue el monstruo que nos han pintado, ni su régimen un paréntesis negro en la historia. Fue, con sus luces y sombras, el artífice de una España que salió del hambre, del analfabetismo y del caos, y que construyó un Estado moderno, con vivienda, trabajo y orgullo nacional. Y eso, aunque duela, hay que decirlo.
Desde aquí, aplaudimos a SND Editores, una editorial valiente que lleva años publicando libros incómodos para el poder, obras que otros sellos ni se atreven a tocar. Gracias a ellos, el lector español puede acceder a una visión distinta, más completa y menos manipulada de su pasado. Y gracias también a los autores que se han atrevido a escribir 50 años de mentiras sobre Francisco Franco, desmontando con datos y documentos muchos de los dogmas oficiales.
Los enemigos de la verdad dirán que es revisionismo. Y lo es. Pero del bueno. Del que revisa lo manipulado, lo censurado, lo distorsionado. Del que se atreve a mirar donde otros cierran los ojos. Que tiemblen los guardianes del relato único: Franco vuelve a estar en boca de todos, y esta vez no por lo que ellos dicen, sino por lo que muchos quieren volver a descubrir por sí mismos.
